DIA 45 (30-12-2018): BANGKOK (I)

Anoche decidimos no poner el despertador. Nos merecemos un buen descanso, después de la semana que hemos pasado madrugando para bucear estos mares. 

Kim se despierta un poco pronto, pero yo sigo durmiendo y finalmente nos levantamos. Duchita refrescante y a desayunar.

 El desayuno en éste hotel solo tiene un par de variantes, pero está rico. Hoy nos decantamos por el American Breakfast.

Como los días en Bangkok eran al final del viaje, los hemos dejado "abiertos" para organizarlos según nuestro estado. En principio la idea era ver templos que Kim estaba interesada, pero llegamos a este punto del viaje un poco cansadas, de modo que decidimos intentar visitar un mercado flotante.

No queríamos visitar el típico mercado flotante que es más para turistas que otra cosa, así que cogí la guía (que peligro tengo con la guía entre mis manos) y le comento a Kim que hay uno que solo lo abren los fines de semana, y teniendo en cuenta que es fin de semana.....

Hablamos con las chicas del hotel para ver como podíamos ir al Taling Chang Floating Market, y nos indican de coger nuevamente el barco naranja (ya el camino lo conocemos bastante bien) e ir a la parada del templo o la siguiente y allí coger un Long tail boat que nos lleve al mercado.

Pues nos ponermos rumbo al embarcadero. Nuevamente el barco está a tope....

Cuando llegamos a nuestra parada, bajamos.....(no dejéis de ver el video de la maniobra de atraque)...

Y pregunto a las señoras que están allí sobre los long tail boats. Una de las señoras llama por teléfono y me lo pasa, el long tail en cuestión nos quiere cobrar como 2500 THB por dos horas. Pero como nosotras somos perro viejo, como suele decirse decidimos buscar otra forma de llegar.

Salimos a la parte terrestre y pregunto a un tuk tuk....gracias a las chicas del hotel, tenemos un papelito escrito en tailandés, el destino al que queremos ir. El conductor habla exclusivamente tailandés, así que saco al google translator para saber cuánto nos va a costar la broma....cuando me dice que 200 THB nos subimos con los ojos cerrados....jajaja

En un una media horita o así llegamos.

Nada más entrar vemos puestos en la carretera a derecha y a izquierda....

Encontramos, como todo mercado tailandés que se precie, comida....las barquitas con los huevos fritos mini son supergraciosas...

Hay muchos puestos de comida pero también de souvenirs, que nos vienen muy bien para ultimar las últimas compras. Y también hay un grupo que toca música típica tailandesa.

Luego llegamos a la zona flotante y vemos auténticas cocinas. 

Una opción interesante sería comer allí, pero tras la semana "dura" de buceo, decidimos darnos un homenaje y reservar un masaje de dos horas. Como las horas centrales del día son las más calurosas, la reserva la tenemos a las 14.30, de modo que no tenemos mucho tiempo para entretenernos.

Éste puesto me encanta, la decoración de los ingredientes y la señora en si....habría comido aquí sin lugar a dudas...

Seguimos caminando y la verdad que la parte flotante es un poco pequeña, pero suficiente para hacernos una idea.

Volvemos a la parte "terrestre" y empezamos a echar un ojo a los distintos puestos y comer algo de "Street Food" tan típica en Tailandia.

Tras hacer una batida por todo el mercado y de las correspondientes fotos, Kim hace su primera ingesta de "street food"

Yo también, aunque la mía no es la primera.

Y cuando ya tenemos nuestras tripas saciadas, cogemos otro tuk tuk para ir al muelle.

Al hombre le dijimos de dejarnos en el muelle 10, pero él decidió dejarnos en el 11. A nosotras nos da un poco igual, porque la idea es coger el barco....si nos dejan porque de nuevo esta a reventar....

Tras un rato, consigo sentarme y me fijo en que el capitán pilota descalzo...mira que curioso....

Bajamos en el puerto que nos toca y caminamos un poquito hasta llegar a Dahra Beauty and Spa.

Aquí hemos reservado un masaje tailandés con compresas de hierbas de dos horas. Al llegar nos reciben con un vasito de agua fresca y una toallita refrescante. Nos preguntan si tenemos alguna zona en la que queramos que nos trabajen más, y ambas le decimos que el cuello y los hombros, y también nos preguntan por la intensidad del mismo.

Tras estás dos horas, decidimos buscar una cafetería para tomarnos un café y comer algo más. Desgraciadamente encontramos de nuevo las grandes cafeterías y los locales están cerrados por las fiestas navideñas. Al final acabamos en un centro comercial donde picamos un crep (mala elección)

Y un cafecito.

De ahí de nuevo a casa. 

Ah!!! Casi me olvido de un pequeño detalle.....tomando el café le pregunté a Kim por el nombre de la torre que las chicas del hotel nos habían recomendado el primer día para ver el atardecer, y me comenta que es la Estate Tower, que casualmente está a escasos 5 minutos de nuestra posición. La animo a ir al Skyroof, y cual es nuestra sorpresa que cuando llegamos, nos impiden el paso por no ir vestidas de etiqueta.....

Así que decidimos seguir nuestro camino a casa. Me hizo gracia que en la época actual, sigan habiendo cabinas de teléfono en Tailandia y además en uso...

Llegamos al hotel y descansamos un poco. Kim comenta al rato de ir a cenar, pero que mejor cambiamos el restaurante de la cena del día anterior. Así que me meto en tripadvisor para buscar ideas.....y lo malo es que veo las fotos de un restaurante Thara Tong con muy buena pinta. Le comento a Kim que he encontrado un sitio donde podemos cenar al estilo tailandés....a lo que me contesta muy graciosa que pensaba que en el mes que lleva en Tailandia, creía haber comido y cenado al "estilo tailandés".....pero a lo que me refiero es sentada en el suelo.

Le enseño las fotos del restaurante y decidimos animarnos, teniendo en cuenta que está cerca de nuestro hotel. 

Pongo el google maps y nos dirige a una zona conocida, pero es cierto que el restaurante no lo hemos visto. Las indicaciones nos dicen que hemos llegado cuando estamos en la puerta del Hotel Sheraton. Total que decidimos entrar y preguntar. A lo que una señorita en la agencia de tours nos dice que está en la segunda planta.

Vamos a la segunda planta y nada, bajamos a la primera y nada, volvemos al hall y en la recepción nos dicen que está en la primera planta antes de las piscinas. Volvemos a subir y finalmente tras la tourné en el Sheraton encontramos el restaurante....

Y las fotos me engañaron, porque cerca de la mesa hay hueco para colgar las piernas.....

Mientras que ojeamos la carta, nos traen una degustación...

Y después nuestra deseada comida....

Tras lo cual volvemos a nuestro hotelito a descansar en nuestras maravillosas camitas.