DIA 44 (29-12-2018): DE PHUKET A BANGKOK

Hoy el día empieza muy tempranito, ya que nuestro vuelo sale a las 8.30 desde Phuket que está como a una hora de Khao Lak. Así que nos toca levantarnos a las 4.00, para a las 4.30 nos lleven del "barco madre" al muelle. 


El primero en levantarse es John y después de él es Dann, que nos acompaña en la zodiac. Nos despedimos de ambos y cogemos nuestro traslado privado por 1200 THB.

Al llegar al aeropuerto nos llevamos la mayor de las sorpresas al pagar el exceso de equipaje. Ya sabíamos de nuestro exceso de equipaje, porque ésta compañía solo permite 15 kg, pero creo que se han pasado con el precio por kg extra.


En fin...no nos queda otra que pagar y buscar un sitio donde desayunar para ahogar nuestras penas...


y en breve embarcamos....


Ahora nos tocaba buscar taxi para ir al hotel reservado en Bangkok: Oriental Heritage Residence. El hotel nos proponía una traslado en limusina por 1500 THB, pero nosotras somos "peero viejo" ya en estos lares....así que declinamos dicha oferta. Al llegar al aeropuerto nos acechan para contratar traslado por 900 THB, pero yo había leído que los taxis no eran caros, y había visto con mi aplicación de Grab que el viaje nos podría salir por unos 350 THB.

Así que seguimos las indicaciones de Taxi. Yo creo que Kim me sigue pero tiene confianza cero. Cogemos taxi y por unos 370 THB (incluido el peaje de la autopista) nos deja en nuestro destino.


El problema es que llegamos antes de la hora del Check-in y el hotel está completo, de modo que nos dan la bebida de bienvenida y nos invitan a volver a las 14.00 para hacer el check-in. Dejamos allí nuestras maletas, preguntamos un lugar local para comer y nos dirigimos para allá caminando.


La verdad es que las callejuelas por las que vamos pudieran dar un poquito de miedo, pero coo es de día...un poco menos. 

Llegamos al sitio y lo acaban de abrir. De momento solo estamos nosotras, pero en seguida se llena.


Creo que teníamos bastante hambre porque pedimos mucha comida



Tras llenas nuestras tripitas decidimos buscar un lugar cercano para tomar un café antes de volver al hotel. El problema es que los cercanos que encontramos son el americano Starbucks y el The Club Coffee que ya habíamos probado en Krabi. De modo que nos decantamos por un tal Tam´s Tom Coffee, o algo así.


Pensábamos que era una cafetería local, pero cual fue nuestra sorpresa que se trataba de otra franquicia en un centro comercial.


Y llego la hora de llegar a nuestro hotel. La habitación muy mona, peor el hecho de que la bañera y el baño en definitiva fuera transparente, no era el máximo de la confortabilidad, pero bueno. Las camas eran super cómodas, y después de las que hemos probado en este viaje....con eso ya nos valía.



Al hacer el check-in me dieron el paquetito que me envió Ritar con el sombrero olvidado.


Después de descansar un rato, decidimos coger el barco público que va por el río Mekong haciendo paraditas, para ir a China Town.


Sacamos nuestro billete por 15 THB y esperamos al barco "naranja".




Llega, y llega a tope, a duras penas puedo hacer una foto, pero no me alarmo, porque imagino que lo cogeremos en alguna que otra ocasión más.


Llegamos a China Town y en seguida se nota en el ambiente. Zona super visitada por propios y turistas.




Y en mente teníamos llegar al Wat Traimit donde se encuentra el "Golden Buddha" de 3 metros de alto y 5,5 toneladas de oro macizo, pero llegamos a las 17.05. Cinco minutos tras su clausura. Así que nos lo tenemos que imaginar.


Vemos a los monjes preparando las tracas para la noche de fin de año que ya está cerca....


 Y nos dirigimos a otra zona, siempre en China Town, 



 Paseando por su calles


y sus mercados




 Y llegamos al Wat Mangkon Kamalawat. Construido en 1871, es el más grande de la zona. El UBOSOT (hall principal) se construyó con estilo arquitectónico chino. También se encuentran la imagen de santos locales chinos.




Y tras la visita, creemos que ya es hora de volver a casa.....El día empezó muy pronto y ya los cuerpos piden descanso. El atardecer es espectacular, lo que el barco está abarrotado de gente y sacar una foto es misión imposible.


De modo que decido hacer un video corto....jejeje


Y como la brisa marina es suave y se agradece, decidimos quedarnos un poco más en el barco, hasta la última parada y volver, ya que hemos conseguido finalmente un sitio donde sentar nuestros culitos.



Al llegar a la última parada, cambiamos el barco y vuelta a casa. De camino al hotel vemos un cafe, y decidimos cenar allí. 
Una ensalada de atún y un salmón con curry rojo y verduritas




Cenamos y nos vamos directamente al hotel a descansar.

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