DIA 10 (25-11-2018): KHAO YAI NATIONAL PARK (I)

El parque nacional Khao Yai es el primer parque nacional del Tailandia y el tercero más grande del país.En el año 2005, junto con las Montañas de Dong Phayayen, fue inscrito como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, con el nombre "Conjunto forestal de Song Phayayen y Khao Yai.

Normalmente la gente viene al parque uno o dos días, pero ¿qué hace Cristinita?, pues contrata un tour de 4 días, para tener más posibilidades de ver fauna en su hábitat propio. 

El tour lo contraté con Tontan Travel y mi punto de encuentro era en el alojamiento a las 8.00. Así que vamos a empezar un nuevo día con energía!!!!!

A las 8.00 entra por la puerta un coche....que luego veréis la foto....y resulta que es mi guía con el vehículo que será nuestro modo de traslado en los próximos días. 

Tras una media horita de conducción llegamos al centro de visitantes, donde nos tiene que registrar.

Como es domingo está plagado de turistas. De modo que tras el papeleo, ponemos rumbo a otra zona. En el camino, se oyen unos sonidos extraños, hay un jeep parado y nosotros paramos también. Hay un gibón de mano blanca. Como de momento no he descargado las fotos de la cámara, nos conformaremos con las del móvil. Aquí pongo un video de un salto del gibón....no se ve muy claro...pero hasta la descarga es lo que tengo...jeje

En los alrededores del centro de visitantes y la carretera se ven muchos ciervos...

Y tras un ratito hacemos un senderito. Por el camino vemos un termitero, al que no presto mucha atención, porque he visto mucho, sin embargo, Tata, mi guía me hace reparar en las termitas, que son de dos tipos, las soldado y las obreras...

Seguimos y vemos una serpiente "pit vogel´s snake" (luego reviso el nombre exacto, que lo tengo apuntado, jejeje), digo vemos, porque al final la vi....pero vaya....que sino me la enseñan, yo paso de largo, pq es increíble como se mimetiza.

Mi guía, Tata, es un chico tailandés de 33 años, de madre procedente de Laos que sin embargo habla un inglés perfecto y que me sorprende porque ha vivido un año y medio en Europa, con lo que entiende muchas de nuestras costumbres. Tata, tiene un telescopio maravilloso, con el que puedo ver a los animales como si estuvieran a escasos dos metros de distancia. Y él es ya un experto en hacer fotos con el móvil y el telescopio...., solo que la calidad de las mismas...son lo que son...pero para el blog, me vienen fenomenal...jeje

Seguimos caminando y Tata escucha un batir de alas que reconoce, es un Great hornbill (ahora no me viene el nombre en español). En el parque hay cuatro tipos de estas aves, que se diferencian fundamentalmente en el pico.

Y caminando vemos el movimiento de un árbol. Vuelve a ser los gibones, pero esta vez....sorpresa....es una hembra con su bebe...guauuuuuuuu... Me cuenta Tata que el embarazo de los gibones dura 7 meses, después de dar a luz, el bebe está con ella hasta los dos años. Los gibones suelen vivir en grupos de unos 6 ejemplares, pero no más.

Y tras éste espectacular inicio de día, nos vamos a comer. En la zona del centro de visitantes hay un bufefet de comida rápida y un restaurante que te preparan la comida sobre la marcha. Me dejo orientar por Tata que me pide una sopa de coco de primero y de segundo  algo con pollo.

De aquí nos vamos al coffee shop, porque hay un árbol al que vienen muchos pájaros, así mientas que estamos de observación, el muchacho toma su dosis de cafeína....jaja

Y tras un rato viendo unos pájaros muy vistosos, volvemos al coche para seguir con la ruta. 

Tengo que dejar aquí el relato, pq salgo de ruta de nuevo....pero cuando llegue esta noche, prometo acabar la entrada...saluditos a tod@s

Aquí estoy de nuevo...jeje...

La idea era hacer una caminatita por un sendero, cuando de repente llaman por teléfono a Tata, que han visto un elefante, me lo comenta, porque estamos lejos del lugar e igual cuando lleguemos ya no está....a lo que respondo....corramos ese riesgo...porque en éste parque nacional, ya te advierten que aunque elefantes hay no siempre se ven, de hecho en los tours te recomiendan que si lo que quieres ver son elefantes vayas a otro parque nacional como el Kuri Buri más al sur.

Como mi idea no era ver en concreto elefantes sino toda la fauna posible, por eso elegí este.

Tata también me advirtió que tendríamos que caminar un rajo bajo la solajera que estaba haciendo, a lo que respondo que tengo sombrero y protector solar....si para él no es problema, menos lo iba a ser para mi....

Total que conduce más rápido de lo habitual en él, llegamos y caminamos a paso ligero....ay madre que ni agua he cogido y efectivamente hace un sol de justicia....pero un elefantito asiático merece el esfuerzo. 

Total llegamos a una torre de avistamiento y el guía que lo llamó le dice que ya se fue. Tata le pregunta que por donde, el otro guía le responde la dirección y Tata me dice, vamos por este sendero a ver si lo vemos pasar. Pues dicho y hecho, seguimos el sendero, bajamos unos "escalones" naturales de troncos y raíces....sorpresa, se para en seco....me dice que no haga ruido, y yo por si acaso me pongo detrás de él.....como si el pobre muchacho que es la mitad mía me pudiera proteger mucho. 

Estamos a escasos 10 metros de la bestia, y la verdad que estoy un poco nerviosa, consigo sacar otra foto mientras Tata saca el móvil para hacer un video. y susurandome me dice que no haga ruido.. cuando de repente....

Le suena el móvil...le estaba llamando el compañero para ver si lo habíamos encontrado....le dice que si...y como el lindo elefantito se dirige hacia nosotros, me dice que me vaya retirando lentamente....... el elefante levanta su trompa y empieza a acercarse más....oigo otra voz que dice "run, run" que traducido a la lengua hispana, viene siendo "correr todo lo que puedas y más allá"....empiezo a correr como una loca, porque de hecho Tata me ha adelantado, cuando de repente veo un grupo de unos 5 franceses y al otro guía, el rugido del elefante es estruendoso....llego a la torre de avistamiento en menos que canta un gallo con el corazón en el pecho.....me he librado de morir aplastada por un elefante.

La verdad que en cuanto subimos a la torre, volvemos a ver al animalito, ya más calmado dirigirse a una poza a la que va a beber y a nutrirse de sales minerales. Cuando el grupo se va, Tata me confiesa, que el elefante nos había olido, pero cuando llegaron las otras personas, al levantar la trompa y olerlos también se sintió amenazado y por eso nos hizo tener claro que estábamos en su territorio.

Comentaba que si no hubiera llegado ese grupo, habríamos podido disfrutarlo un poco más...

Con sentimientos encontrados de felicidad por haber visto un elefante salvaje a tan poca distancia, en un parque en el que supuestamente no lo iba a ver, y de susto, por lo que pudiera haber pasado, nos dirigimos ya al centro de visitantes, en el coffee shop hay un árbol que a Tata le encanta porque se posan muchos pájaros... y buscando pajaritos vemos un par de novios.

Me dice Tata que muchas parejas vienen al parque a hacerse las fotos de novios, lo cual me sorprende algo, pero lo cierto es que todos los días hemos visto alguna pareja.

Hoy toca safari nocturno. Éstos safaris están organizados por los Rángers del parque, es decir que Tata no iba a venir conmigo. Pera a la hora establecida 6.40, me presentó al que iba a ser mi conductor y mi ojeador. Básicamente consiste en ir en la parte trasera del pick-up y mirar hacia donde el ojeador dirige la luz, para ver si vemos los ojos de algún bichillo, pero la distancia es tan grande y la velocidad del coche tan rápida que ver, lo que se dice ver y menos aún fotografiar, se ve poco.

No obstante esa noche vi a los ciervos, una jineta, un puercoespín y para de contar.

A las 20.00 de la tarde me traía Tata de vuelta a casa, con mi cena en un "taper" porque eso de cenar a las 17.00 iba a estar difícil para mi.

Tras un día tan intenso, caigo rota en la cama...ésta es más blandita, así que a ver si cojo el sueño rapidito..